El DT lamentó la derrota en Cilindro y destacó: "Los puntos que más me duele perder, son los que perdemos en casa".

También afirmó que la clasificación a la Sudamericana sigue siendo posible: "Todos tienen que jugar y no hay nada perdido".

Un poco molesto por el arbitraje, pero sobre todo indignado por los puntos perdidos, Miguel Angel Russo dio la cara después de la derrota con Banfield y después de los primeros reproches explícitos de la gente en el torneo. “El rival hizo algunas cosas bien. Nosotros no estuvimos finos en los últimos 20 metros, nos faltó precisión. Después del 0-2 reaccionamos. Y creo que lo pudimos dar vuelta. Pero la anulación al gol de Teo incidió nps afectó. Ahora ya está. No hay excusas. Hay que agachar la cabeza y seguir trabajando”, expresó.

Russo no quiso referirse a los silbidos del público y se mostró todavía entusiasta con la situación del equipo de cara a la Sudamericana. “Falta mucho y hay que mantener la ventaja. Todos tienen que jugar, no hay nada perdido. Va a estar apretado lo de la Copa. Hemos dejado pasar situaciones, creo que tendríamos que tener cuatro o cinco puntos más”.

Lo que sí se reprochó el DT fue que esta nueva derrota, la octava del Clausura, se produjera en el Cilindro. “Los puntos que más me duele perder son los que perdemos en el Cilindro. A mí me preocupa perder en casa. Las campañas se sostienen desde ahí, desde las localías”, manifestó. Y cerró: “Los cambios, las lesiones nos están matando. Cuando los jugadores vuelven, no vuelven al mismo nivel. Es así”.